lunes, 30 de octubre de 2023

Apuntes para un movimiento en defensa de la educación pública y gratuita y una ciencia para la independencia nacional y los derechos del Pueblo Educación, Universidad, Ciencia y Técnica como parte de un Proyecto Nacional

 



Apuntes para un movimiento en defensa de la educación pública y gratuita y una ciencia para la independencia nacional y los derechos del Pueblo
 
Educación, Universidad, Ciencia y Técnica como parte de un Proyecto Nacional
 

DEFENDER LOS DERECHOS CONQUISTADOS
Y LUCHAR POR LOS QUE FALTAN.

 

Por Horacio Micucci.

 

 

“La siembra de la ciencia germinará para la cosecha del pueblo”.

Epígrafe de “Principios de la Química” Dimitri Mendeleiev

 (Autor de la TABLA PERIÓDICA DE LOS ELEMENTOS) 1834-1907

 

A MANERA DE PRÓLOGO

Unos días antes de escribir estas líneas la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) autorizó la inscripción de la vacuna ARVAC Cecilia Grierson contra la COVID-19. Se trata de la primera vacuna desarrollada enteramente en Argentina.

Se suma este ejemplo a muchos otros en variados campos. Como el de la energía atómica, para dar uno más.

Sin embargo, alguna vez el ex Ministro Cavallo mandó a los científicos “a lavar los platos”. Y el candidato Milei dijo que “El Conicet tiene 35 mil personas. La NASA, 17 mil y produce más”

Miente, miente, que algo queda, era el lema del hitlerista Goebbels.

Poco después Chequeado.com aportaba la siguiente información:

  • ·         Según el ranking SCImago 2023, que evalúa entre otras cosas la productividad científica dentro de la categoría de organismos gubernamentales, el Conicet aparece en el puesto 22 y la NASA en el 28, entre más de 1.700 instituciones del mundo evaluadas.
  • ·         Esto es así a pesar de que en la Argentina el Conicet tiene un presupuesto en dólares 72 veces menor al de la NASA, y que el Estado nacional destina menos recursos sobre el PBI que el Gobierno de los Estados Unidos.
  • ·         Además, no es correcto comparar en términos de cantidad de personal al Conicet con la NASA, ya que ambos organismos no tienen las mismas finalidades y funciones. El equivalente argentino de la NASA es la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE), que está conformada por 288 personas.

Por una relación causal, Domingo Cavallo, ex ministro de Menem y de De la Rúa, ha ido a amontonarse en el corral de un nuevo Mesías salvador, Javier Milei (que también propone eliminar el CONICET y el INTA, entre otras cosas). Allí confluye con economistas y ex funcionarios del menemismo (Roque Fernández y otros) partícipes de la fabulosa entrega del patrimonio nacional en ese gobierno, con defensores de la Dictadura que aplicó a sangre y fuego el Plan de entrega nacional de Martínez De Hoz (como la candidata a la Vicepresidencia Victoria Villaruel y el tucumano Bussi, hijo del dictador). Y dirigentes sindicales desprestigiados como Luis Barrionuevo, que ahora, repentinamente se separa por decisión propia, no por decisión de Milei.

De Barrionuevo se recuerda que propuso, en un programa periodístico de Jorge Lanata, que para que la Argentina salga adelante "deberíamos dejar de robar durante dos años". Él mismo se incluyó. A confesión de parte relevo de prueba.

Por supuesto, Mauricio Macri, hizo lo que había planeado desde el principio: unir a lo más reaccionario de la derecha argentina, los más ajustadores, entreguistas, antinacionales y antipopulares, para el Balotaje del 19 de noviembre de 2023.

Es la propuesta de una Argentina sin derechos, más sumisa, más indefensa, más dependiente, con un pueblo llevado a sus límites de subsistencia.

Y en el plano de la educación, la ciencia y la tecnología, es la mercantilización a favor de los grandes beneficiarios de la dependencia argentina.

 

EDUCACIÓN: DATOS.

Para sacar algunas conclusiones es bueno detenerse en algunos datos. (Fuente: Ministerio de Educación de la Nación y Organización Argentinos para la Educación-OAE).

 

TOTAL DE ALUMNOS DE TODAS LAS GESTIONES. Año 2022

SE EXCLUYE EL NIVEL UNIVERSITARIO

Total de alumnos

11.620.873

100,0%

Estatales

8.385.889

71,2%

Privadas

3.221.715

27,7%

Gestión social-cooperativa

13.269

<0,1%

 

El 71,2% de los alumnos concurren a escuelas de gestión estatal. Sólo el 27,7% lo hacen a escuelas de gestión privada.

 

TOTAL DE ALUMNOS DE SEGÚN NIVELES.

SE EXCLUYE EL NIVEL UNIVERSITARIO. Año 2022

Inicial

1.706.658

Primaria

4.583.681

Secundaria

4.329.243

Superior No Universitaria

1.001.291

 

En la Argentina, las metas de universalización de la jornada extendida o completa en el nivel primario están lejos de alcanzarse. Solo el 14,1% de los estudiantes de primaria asiste más de 4 horas a la escuela, ya sea con jornada completa o extendida. Además, según los datos analizados, a nivel país, el 7,3% de los alumnos asiste a jornada completa (8 horas de clase) mientras que el 6,8% asiste a jornada extendida (más de 4 horas, pero menos de 8). En términos regionales, la provincia que se encuentra más cercana a la universalización del nivel primario con jornada completa o extendida es Tierra del Fuego (81,4%) mientras que en el otro extremo se encuentra Santa Cruz (2,0%). CABA tiene 45,8%. Provincia de Buenos Aires tiene 7,9%.

El dato surge del informe “Extensión de la jornada escolar en el nivel primario” del Observatorio de Argentinos por la Educación en base a cifras provenientes del Relevamiento Anual llevado a cabo por el Ministerio de Educación de la Nación en 2019. (Chequeado.com). La jornada completa es importante para que los niños puedan tener horas de aprendizaje, deporte, actividades sociales, etc. que no tendrían si sus padres no se las pudieran pagar. Pero también es importante para las familias cuyos padres trabajan y no pueden estar con los niños. De esta manera, la jornada extendida o completa es una reivindicación a conquistar para que sea la sociedad, y no las posibilidades individuales de cada familia, la sostenga la educación, la diversión y la integración social de los niños.

Pero, establecer la jornada completa, implica más escuelas, más docentes mejores pagos y mejor formados y lógicamente más presupuesto destinado a educación. Además, la integración de escuelas con clubes barriales, daría un sentido más integral a esta extensión de jornada, evitando algunas de las críticas de algunos pedagogos referidas al cansancio de niños obligados a quedar “depositados” en aulas, durante 8 horas, más porque sus padres no tienen donde dejarlos que por necesarias razones integrales educacionales, deportivas, artísticas, sociales, etc.

Algunos, empeñados en mercantilizarlo y privatizarlo todo, centran la cuestión educativa en los paros docentes (en una clara oposición a derechos sindicales adquiridos que figuran en el artículo 14 bis de la Constitución vigente). No advierten que para que no haya protestas y medidas sindicales, deben cumplirse las condiciones de trabajo y salariales que se reclaman. Dar importancia a la educación es también darle importancia al docente y sus condiciones de trabajo (que incluye su salario). En Educación y en Salud, los bajos salarios llevan a lo que se llama pluriempleo, con jornadas extenuantes, que dificultan el desempeño e impiden tiempos de formación permanente.

Es positivo, y un logro a defender, el porcentaje de educación gratuita y estatal. Pero hay muchos derechos por los que luchar en este aspecto. La cuestión es qué soluciones se proponen:

¿profundizar el camino de privatización y mercantilización de la enseñanza, que deja en el camino cada vez a mayor número de familias, o profundizar el camino de considerar a la educación como un derecho inalienable y, a la vez, una necesidad?

Lo segundo es lo que vale (y valdrá el 19 de noviembre) si queremos una Argentina Independiente de toda dominación extranjera (como dice el Acta de nuestra Independencia) con una Democracia Grande, con total vigencia de los derechos populares

Un 8 de julio de 1884, bajo la presidencia de Julio A. Roca, se promulgó la Ley Nº 1.420 de Educación común, gratuita y obligatoria. Esta normativa fue la piedra basal del sistema educativo nacional. Se estructuró un sistema de instrucción primaria pública, gratuita y obligatoria.

La discusión acerca de la Ley de la Educación fue uno de los debates más intensos en la historia argentina. Las divergencias fundamentales se centraron alrededor de la necesidad o no de una Ley de Educación y de la gratuidad y obligatoriedad de la Escuela.

La Ley aprobada estableció la instrucción primaria obligatoria, gratuita y gradual. La obligatoriedad suponía la existencia de la Escuela Pública al alcance de todos los niños y niñas, medio para el acceso a un conjunto mínimo de conocimientos, también estipulados por Ley. (fuente: Ministerio de Educación de la Nación).

En el plano universitario, el movimiento estudiantil de 1918, conocido como REFORMA UNIVERSITARIA (ver Apéndice I), impulsó medidas de democratización universitaria. Fue un amplio movimiento nacido en la Universidad Nacional de Córdoba, extendido a todo el país e incluso al resto de América Latina. Se propuso la gratuidad pero, aunque el movimiento contaba con la simpatía de Hipólito Yrigoyen, no se logró la aprobación en el Congreso, siendo el primer gobierno del General Perón, en 1949, quien la estableció. En efecto, el 22 de noviembre de 1949 se estableció la gratuidad universitaria en la Argentina a través del Decreto Presidencial Nº 29.337 de Juan Domingo Perón, que suprimió el cobro de aranceles en las instituciones de Educación Superior.

Un primer retroceso en la gratuidad de la enseñanza se produjo durante la dictadura golpista comenzada en 1955 que aprobó, el 22 de diciembre de 1955, el decreto-ley 6403, que permitía la creación de universidades privadas; el artículo 28 de la norma también las facultaba para entregar títulos y diplomas académicos; sin embargo, este último aspecto estaba sujeto a la reglamentación que se dictara y el gobierno militar dispuso dejar esa decisión en manos del gobierno que fuera elegido en la elecciones de 1958, que fue el de Arturo Frondizi.

Frondizi, traicionando el programa por el que fuera elegido (lo mismo hizo con la política petrolera), puso en vigencia el artículo 28. Esto originó una gran huelga que abarcó universidades y escuelas secundarias, en la segunda mitad de 1958, y que duró varios meses. Quien esto escribe participó en esa huelga como estudiante de primer año del bachillerato secundario estatal. Y el debate estudiantil se extendía mucho más que al tema de la emisión de títulos. Se debatió que era un paso en dirección a la privatización de la enseñanza. Debo decir que lo que pronosticaban jóvenes, casi niños, se cumplió. Era un intento más de llevar a la enseñanza estatal y gratuita al ahogo presupuestario y a su extinción. Como ahora, si triunfaran las ideas de Milei.

En la década del 90 (Gobierno de Menem), transcurridos poco más de 100 años desde la sanción de la Ley N° 1420 de Educación Común, y habiendo pasado por gobiernos democráticos y militares, comienzan a aplicarse políticas contrarias a la gratuidad y obligatoriedad de la enseñanza.  Se implementan medidas promocionadas por organismos imperialistas internacionales de crédito, con una fuerte tendencia a la mercantilización educativa, donde se priorizó la educación privada en desmedro de la educación pública. Esto llevo a que el Sistema Educativo Nacional no ofreciera la garantía de educación igualitaria, gratuita y de calidad, que son los pilares básicos de la educación argentina que debemos defender y profundizar.

Con la Ley Federal de Educación del período menemista se descentralizo el Sistema, y se delegó en las provincias la responsabilidad de mantener el Sistema Educativo, lo que llevó al colapso financiero de la educación estatal. Los resultados fueron deserción escolar, segmentación social, aumento en la brecha entre clases, etc. De esta manera se hizo necesario el replanteo de dicha la Ley Federal de Educación.

Al respecto, a fines de 2006 se sanciona la Ley de Educación Nacional N° 26.206. Por esta ley se extiende la obligatoriedad de la enseñanza al nivel secundario.

El debate permanente, y que continúa, es entre dos posiciones:

a)       que la educación es un derecho inalienable y que la gratuidad y la responsabilidad estatal en su implementación y sostenimiento presupuestario es una clave irrenunciable,  

b)      la defensa de la privatización y mercantilización de la enseñanza,

 Y el debate continúa.

Tres artículos de la ley 26.206 expresan esta cuestión.

ARTÍCULO 9.- El Estado garantiza el financiamiento del Sistema Educativo Nacional conforme a las previsiones de la presente ley. Cumplidas las metas de financiamiento establecidas en la Ley N° 26.075, el presupuesto consolidado del Estado Nacional, las Provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires destinado exclusivamente a educación, no será inferior al seis por ciento (6 %) del Producto Interno Bruto (PIB).

ARTÍCULO 10.- El Estado Nacional no suscribirá tratados bilaterales o multilaterales de libre comercio que impliquen concebir la educación como un servicio lucrativo o alienten cualquier forma de mercantilización de la educación pública.

ARTÍCULO 12.- El Estado Nacional, las Provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, de manera concertada y concurrente, son los responsables de la planificación, organización, supervisión y financiación del Sistema Educativo Nacional. Garantizan el acceso a la educación en todos los niveles y modalidades, mediante la creación y administración de los establecimientos educativos de gestión estatal. El Estado Nacional crea y financia las Universidades Nacionales.

El diario La Nación publicaba lo siguiente, con motivo del debate de esta ley en Diputados, en diciembre de 2006: “las principales bancadas de la oposición -la UCR, ARI y Pro, entre otros- votaron en contra, con la convicción que la nueva norma es sólo un decálogo de "buenas intenciones".”

El debate no está saldado. Permanentemente, en la práctica, la educación estatal y gratuita sufre recortes que se reflejan en el número y estado de las escuelas, los salarios docentes, la caída de niveles educativos que perjudica a los que menos posibilidades económicas tienen, con niveles de pobreza e indigencia crecientes. Y persisten las propuestas destinadas a mercantilizar la enseñanza, y a entregar “al mercado” la responsabilidad en este tema.

Hay mucho para defender y mucho para lograr. El 19 de noviembre es un mojón en ese sentido. Vuelve el embate contra la educación como derecho.

 

EDUCACIÓN: ¿DERECHO O MERCANCÍA INALCANZABLE PARA LA MAYORÍA?

Como se escribió más arriba, el 71,2% de los alumnos concurren a escuelas de gestión estatal. Sólo el 27,7% lo hacen a escuelas de gestión privada.

Y los valores de cuota mensual de esas escuelas de gestión privada depende del porcentaje de subsidios del Estado hacia ellas.

 

Cuota mensual a JULIO DE 2023, EN ESCUELAS PRIVADAS, SEGÚN PORCENTAJE DE SUBSIDIO ESTATAL

% DE SUBSIDIO

CUOTA MENSUAL NIVEL PRIMARIO

100% DE SUBSIDIO

$ 6.260.-

  80% DE SUBSIDIO

$ 11.550.-

  70% DE SUBSIDIO

$ 14.770.-

  60% DE SUBSIDIO

$ 22.122.-

  50% DE SUBSIDIO

$ 25.000.-

 

Puede deducirse que la cuota de escuela primaria sin subsidio no era menor, en julio de 2023, a $ 50.000.- por alumno primario. Y en este gasto no están incluidos viajes, materiales, vestimenta, etc.

El INDEC establece el llamado Costo de Crianza para estimar cuanto destinan las familias a cuidado y mantención de sus hijos.

En Julio de 2023 era:

  • Para menores de 1 año: $ 103.635 
  • Infantes de 1 a 3 años:   $ 122.346 
  • Tramo de 4 a 5 años:      $ 98.516 
  • Niños, niñas y adolescentes de 6 a 12 años: $ 93.932 

Este costo no incluye gastos de cuotas de colegios privados.

 

LA NOVEDAD DEL VAUCHER EDUCATIVO

Javier Milei propone como “novedad” el sistema del vaucher educativo.

El sistema de voucher o cheques educativos consiste básicamente en delegar algunas tareas del Estado (habitualmente derechos tales como la educación, salud, alimentación, vivienda, etc.) mediante subvenciones o subsidios a la demanda: es decir, a las familias y, en este caso, a los estudiantes mediante la transferencia de vouchers o cheques con la supuesta intención de facilitar la libre elección de las personas y las familias entre los ofertantes de estos servicios.

¿Es así?

Veamos el asunto más en detalle.

La subvención que recibe cada alumno se transfiere (se usa como pago) directamente al prestador del servicio (en este caso, a las escuelas o instituciones implementadoras) por cada estudiante que matriculan o registran. Se trata, según los anarcocapitalistas (así se autodenominan), de una subvención al receptor del servicio. El modelo tradicional de financiamiento de la educación consiste en la asignación de una parte del presupuesto nacional, habitualmente variable de acuerdo con el gasto real y a la disponibilidad de recursos, a las instituciones que ofertan el servicio educativo (vale decir, a la oferta).

Si, con esta concepción, en julio de 2023, se le hubiera dado un vaucher a cada alumno, en monto hubiera sido de $ 50.000.- como mínimo. El dólar blue costaba en ese mes alrededor de $ 500.- y el Oficial unos $ 280. (constatar en Internet)

O sea, el vaucher de $ 50.000, sería equivalente a 175 dólares a precio oficial o 100 dólares a precio Blue.

Para los 11.620.873 alumnos No Universitarios significarían, a precio Blue, U$A 1.162.087.300.- sólo para cubrir las cuotas mensuales escolares.

¿En serio alguien cree que los que quieren ajustar el Gasto Público (Milei, Macri, Bullrich, Schiaretti, etc.), destinarán más de 1000 millones de dólares mensuales y más de 12.000 millones de dólares anuales para pagar las matrículas escolares no universitarias?

Ni hablemos de las Universidades, cuyo costo anual se estima en unos $ 3.000.000 al año, unos 3.000.- dólares Blue a octubre de 2023. Y un promedio, por carrera de 6 años, de 18.000 dólares por lo bajo (A dólar Blue, una familia tipo, con dos hijos debiera poder destinar unos 40.000 dólares para hacer que sus hijos logren un título universitario).

¿Cuántos alumnos y cuántas familias podrán sostener ese gasto, si muchos ni siquiera pueden pagar el alquiler o la alimentación?

Ni hablemos del caso de escuelas rurales en zonas alejadas que tienen un número bajo de alumnos, pero que son necesarias ¿podrán sostenerse con el magro ingreso de una docena de vauchers?

Si no pueden subsistir serán deficitarias y deberán desaparecer, dirán a coro en la manada de antipopulares y antinacionales. Pero resulta que no es así, es de interés nacional (no sólo individual) cumplir ese derecho a la educación, como más abajo veremos.

Cavallo, en su tiempo, propuso dividir el presupuesto sanitario en el número de personas del país. Y que cada uno se arreglara con eso. Como pudiera. Claro, el que tuviera una enfermedad costosa no llegaría a atenderse. Sólo sobrevivirían los sanos.

Es y era Malthusianismo social puro. El inglés Thomas Robert Malthus (1766-1834), sostenía que los pobres se multiplicaban, presas del instinto de reproducción, aún en condiciones de miseria, entre otras cosas, por su irresponsabilidad, fomentada, entendía Malthus, por las leyes de pobres inglesas que para Malthus suponían una liberación de la restricción moral y finalmente una carga innecesaria para el Estado en forma de ayudas a padres e hijos que suponían costes innecesarios. Por eso se hizo una nueva Ley de pobres de 1834 (año en que falleció Malthus), inspirada en sus teorías, que era mucho peor: centralizaba la asistencia pública. Y los desempleados e incapaces de mantenerse solos eran "recogidos" como cualquier animal vagabundo en una institución llamada workhouse o "casa de trabajo", que separaba cuatro bloques de indigentes: ancianos y discapacitados; niños; hombres sin discapacidad y mujeres sin discapacidad. Aparte del problema del trabajo infantil, se convirtió al cabo en un castigo y signo de discriminación y vergüenza social: hombres, mujeres, y hasta niños, fueron llevados a trabajos casi esclavos. Coincidía esto con la necesidad de la industria inglesa de tener mano de obra muy barata en las ciudades. Cualquier parecido con lo que expresaron y expresan algunos candidatos para las elecciones de octubre 2023 y Milei para noviembre, no es pura coincidencia. Educación del sálvese quien pueda, pérdida de derechos de estabilidad en el trabajo, más desocupación y, por consecuencia, mano de obra casi esclava.

Lo planteado para la atención sanitaria por Cavallo en los `90, es la propuesta del vaucher educativo por Milei hoy. Con el agravante que algunas escuelas podrían decidir dar un nivel mínimo por ese vaucher y agregar ítems no incluidos que debieran pagarse aparte. Es parte de la libertad de los dueños, dirían nuestros modernos anarcocapitalistas. El Mercado lo arreglará.

Pero estos anarcocapitalistas no comprendieron que éste no es el capitalismo de la libre concurrencia de Adams Smith o David Ricardo. Es la época de la fase imperialista del capitalismo que incluye los siguientes cinco rasgos básicos, que cualquiera puede comprobar en la experiencia cotidiana:

1) la concentración de la producción y del capital ha alcanzado un punto tan elevado de desarrollo, que ha creado los monopolios, decisivos en la vida económica;

2) la fusión del capital bancario con el industrial y la formación, sobre la base de este “capital financiero”, de la oligarquía financiera;

3) la exportación de capital, a diferencia de la exportación de mercancías, adquiere una importancia excepcional;

4) la formación de asociaciones capitalistas monopolistas internacionales, que se reparten el mundo; y

5) la culminación del reparto territorial del mundo entre las grandes potencias capitalistas. El imperialismo es el capitalismo en la fase de desarrollo en que se ha implantado el dominio de los monopolios y del capital financiero, en que la exportación de capital ha adquirido gran relevancia, en que los trust internacionales han empezado a repartirse el mundo y en que ha terminado el reparto del planeta entre las grandes potencias capitalistas y que todo nuevo reparto traerá guerras (momento álgido que vivimos hoy, camino a una tercera guerra mundial sobre la que el Papa ha advertido ya)

Acá no hay un mercado con leyes propias que lo equilibran todo, como sostiene nuestro león anarcocapitalista (con el apoyo de Macri, y otros con antecedentes antipopulares y antinacionales).

El caso más regresivo de vaucher es Chile, donde este subsidio, en principio destinado a emparejar la cancha, terminó favoreciendo a las capas de ingreso más altas, dado que la educación se concibe como un bien de consumo más que como un derecho social.

Ver: https://rches.utem.cl/articulos/sistema-de-cheques-o-vouchers-educativos-en-la-educacion-para-jovenes-y-adultos-en-extrema-vulnerabilidad-el-caso-de-el-salvador/

Dice CETERA:

Lo que en realidad termina produciendo este modelo que impulsa la derecha es más privatización, segregación, exclusión y discriminación, limitando las posibilidades de diseñar políticas socioeducativas nacionales y jurisdiccionales para la inclusión y la ampliación de derechos, especialmente para los sectores más excluidos. Con el sistema de vouchers las que terminarían definiendo la política educativa serían las escuelas en un contexto en el que compiten como empresas en el mercado para conseguir el financiamiento.

En el caso de la Argentina, se da la paradoja de que el planteo sobre los vouchers lo hace un candidato que, por un lado, quiere hacer estallar al Estado, pero, al mismo tiempo, nos está diciendo que será el Estado el que le dará el dinero (vale o cheque) a cada familia. Llamativamente, este candidato que reniega de los “planes” y “subsidios”, con el sistema de vouchers estaría convirtiendo el derecho a la educación en un plan más, subsidiando a las familias (dando vales o cheques) para pagar la escuela.

Especialistas en pedagogía han hecho críticas a las experiencias internacionales con VAUCHERS EDUCATIVOS. La principal crítica de estos vales escolares y los créditos fiscales es que ponen a la educación pública en competencia con la educación privada, amenazando con reducir y reasignar los fondos de las escuelas públicas a las escuelas privadas. Los opositores a este sistema privatista cuestionan la creencia de que las escuelas privadas son más eficientes.

Los maestros de escuelas públicas y los sindicatos de docentes también han luchado contra los vales escolares. En los Estados Unidos, los sindicatos de docentes de escuelas públicas, especialmente la Asociación Nacional de Educación (el sindicato laboral más grande de los EE. UU.). Argumentan estas asociaciones, que los vales escolares erosionan los estándares educativos y reducen los fondos, y que dar dinero a los padres que eligen enviar su hijo a una escuela religiosa o de otro tipo es inconstitucional. 

En Suecia, previamente, el sistema educativo era centralizado y monopolizado desde la órbita estatal. En esa época los resultados obtenidos en los exámenes internacionales se situaban muy por encima del promedio de la OCDE en las asignaturas más fuertes, y similar al promedio de la OCDE en el peor de los casos.

A principios de los años 90 Suecia sufriría una fuerte crisis económica que resolvió a través de un giro hacia políticas de derecha y a la privatización de los servicios públicos. El cambio de modelo educativo fue una cuestión más ideológica que de necesidad, basada en la idea de que las instituciones públicas son ineficientes por definición —entendiendo que en manos de privados serían más racionales y eficientes—, y el uso de recursos estatales se comenzó a cuestionar con mayor ímpetu. Lo que se buscaba era aumentar la competencia y fomentar la formación de escuelas privadas. La teoría disponía que las escuelas de baja calidad sufrirían la pérdida de sus alumnos y eventualmente cerrarían, premiando de esta forma a las que mejor satisfagan las demandas de los padres. Posteriormente a la implementación de los váuchers, los resultados de los exámenes PISA, una muestra global del conocimiento de los alumnos de 15 años, fueron un duro golpe para el país. Suecia sufrió el más brusco descenso en sus calificaciones entre todos los países evaluados entre los años 2003 al 2012.

Otra dificultad que se puede encontrar es el método de evaluación: las escuelas favorecen exámenes con preguntas abiertas que permiten un alto grado de subjetividad en la calificación, y en muchos casos los docentes son presionados por los directivos para otorgar buenas calificaciones aun cuando no correspondieran, con el fin de incentivar a los padres a que continúen enviando a sus hijos a esa institución. Es decir, el alumno que antes era un sujeto de derecho pasó a ser un cliente (junto a su familia) al que había que mantener, si podía pagar.

En Suecia hubo un leve aumento de la segregación que siguió el patrón de privatización de las escuelas, tal como se puede ver reflejado en un reporte de la OCDE y otro de UNICEF. A través de la introducción de la libre elección, la sociedad tuvo una tendencia mayor a la división de acuerdo a su condición social. El índice de inclusión académica cayó más que en el resto de los países miembros de la OCDE en el período comprendido entre 2003 y 2012. (https://economia.wiki/paises/funciona-el-sistema-de-vouchers-educativos-en-suecia/ ).

Pero volviendo al concepto mercantil de Milei, Macri y los procesistas, negacionistas y menemistas que los rodean, en la ciudad de Quilmes (provincia de Buenos Aires) ha cerrado sus puertas un colegio privado de 85 años de existencia. Simplemente, de un día para el otro, el Colegio anunció su cierre. Argumentan que es su derecho, según las leyes del mercado. Pero parece, según se comenta, que cerraron porque sus dueños encontraron mejores negocios, como construir un edificio torre en el terreno de la escuela. Es la ley del Mercado, dirá Milei. Pero los derechos no deben estar supeditados al Mercado. Todos los colegios en esas condiciones deben ser asumidos como instituciones públicas. Ahora, si en estas situaciones, la Educación Pública debe asumir el problema, ¿no es una muestra que la Educación como negocio no es el camino? Es preciso que todos se den cuenta que nadie está a cubierto. El caso de la escuela de Quilmes dónde concurren alumnos de un sector social con mejores posibilidades económicas, así lo demuestra

Tengámoslo en cuenta, porque cinco o seis colegios del conurbano, de características similares, están en las mismas condiciones. En salud y en educación, cuando las papas queman, el sector público debe sacarlas del fuego.

 

DERECHOS A DEFENDER Y DERECHOS A CONQUISTAR

De lo anterior surge claramente que es necesario extender la educación, universalizarla y mantener y ampliar la gratuidad.

Primero, porque la educación es un derecho

Y segundo porque, de las fuerzas productivas de un país, las maquinas e instrumentos y el ser humano que trabaja con ellos, éste último es el más importante. Su desarrollo significará un avance hasta en la mera cuestión productiva. Una Argentina Independiente y de derechos efectivos para el pueblo exige conquistar una educación, como derecho inalienable, obligatoria y gratuita y de altísimo nivel. Pero la educación no traerá el desarrollo y el bienestar humano. Por el contrario, los pueblos hacen revoluciones para garantizar sus derechos a alimentos, vivienda, tierra, trabajo, educación y salud. Y en ese camino se transforman a sí mismos.

Si consideramos la Tasa de Empleo de Argentina, según el nivel de educación adquirido, el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA) sostiene que la calidad del empleo, la desocupación y las retribuciones al trabajo están fuertemente asociadas al nivel educativo de los trabajadores. El subempleo inestable y la desocupación son diferenciales según el nivel de instrucción.

Aproximadamente la mitad de los ocupados que no aprobaron el secundario residen en hogares en situación de pobreza. El 31,9% de los ocupados que solo tienen secundario aprobado reside en hogares en situación de pobreza, al igual que el 21,1% de los que cursan o cursaron el terciario o la universidad, pero no se recibieron y, solamente el 7,6% de los de nivel terciario/universitario aprobado. (El Cronista. Mayo de 2023)

 

EDUCACIÓN Y EMPLEO

Un indicador importante publicado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) contempla la distribución de la población de 18 a 24 años según su situación educativa y laboral, ya sea jóvenes que se encuentran en algún nivel educativo, fuera del sistema educativo, que estudian y trabajan, o bien si no estudian ni trabajan, fenómeno conocido como “Ni-Ni”.

Los datos de la Argentina indican que el 47,3 por ciento de jóvenes en esa franja etaria cursa algún nivel educativo, mientras que el 52,8 por ciento se encuentra fuera del sistema educativo. Por su parte, el 12 por ciento del total estudia y trabaja, mientras que el 23,8 por ciento no estudia ni trabaja (Ni-Ni). En el porcentaje de “Ni-Ni”, nuestro país ocupa el lugar 31 de los 38 países incluidos en el listado de OCDE. Listado en el que los Países Bajos tienen menor proporción de NI-Ni , con el 4,6 por ciento, mientras que en último lugar (mayor NI-NI) se encuentra Sudáfrica, con el 44 por ciento.

Las cifras representan un problema evidente, que alcanza al mercado laboral. Tal como señala el informe de la OCDE, hay una correlación positiva entre el nivel educativo alcanzado y la tasa de empleo. Mientras más alto es el título logrado, más chances de tener un trabajo. Y allí Argentina no es la excepción: las personas de entre 25 a 64 años que no terminaron el secundario tienen una tasa de empleo del 66%, mientras que aquellas que sí lo finalizaron la tasa asciende al 73%. Para aquellas que culminaron el terciario, dicha tasa es del 85%, y para las que hicieron un doctorado sube al 93%.

En el mismo informe se incluye un listado similar, pero que contempla sólo a la población de 25 a 29 años de edad y la diferencia según el nivel educativo alcanzado. Con relación a la Argentina, se observa que, de aquellas personas que alcanzaron un nivel educativo inferior al secundario completo no continuaron estudiando y ni trabajando (Ni-Ni) alrededor del 35%, mientras que el 61% solo trabaja y el 4% continúa estudiando. De los que alcanzaron el nivel secundario completo, el 28% se encuentra en situación de “Ni-Ni”, el 70% trabaja y el 2% continúa estudiando. De quienes lograron el nivel terciario, alrededor del 9% se encuentra en situación de “Ni-Ni”, el 40% trabaja y el 50% continúa estudiando.

Fuente: Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA)

https://www.unidiversidad.com.ar/solo-1-de-cada-4-personas-en-argentina-tiene-titulo-terciario-o-universitario

Consultada por MDZ, Mónica Marquina, investigadora del CONICET y especialista en temas educativos, sostiene que:

 “este dato es para los mayores de 25 años, pero si se mira a los que ahora están estudiando, la situación es peor. Respecto de los que entran en las universidades públicas, los que se gradúan no llegan al 20%. Tenemos un sistema de educación superior muy abierto, sin cursos de ingreso, que tiene una de las matrículas más altas de América Latina, lo que hace pensar en una universidad inclusiva, pero no gradúa suficientemente. Los más desventajados, como siempre, son los jóvenes de menores ingresos, que se quedan en el camino".

Si consideramos el nivel de estudios de los ocupados en Argentina, en el segundo trimestre de 2023, y la Tasa de empleo, calculada como porcentaje entre la población ocupada y la población total de referencia que, en este informe de INDEC, son una muestra representativa de 31 conglomerados urbanos, se observa lo siguiente:

 

TASA DE EMPLEO 2º TRIMESTRE 2023: 44,6 %

Primario incompleto                                   1,2 %

Primario completo                                      5,0 %

Secundario incompleto                              7,4 %

Secundario completo                               13,4 %

Superior y universitario incompleto        6,7 %

Superior y universitario completo         10,8 % 

Sin instrucción                                             0,1 %

 

O sea, se estima una ocupación de 44,6 ocupados cada 100 personas. De ellos, sólo 6,2 ocupados sobre 100 tienen nivel educativo Primario Incompleto o completo. Con secundario incompleto o completo poco más de 20 sobre 100 tienen secundario incompleto y completo. Poco menos de 20 ocupados sobre 100 personas tienen estudios universitarios completos o incompletos. Sin instrucción son una proporción indetectable de los ocupados cada cien personas. Si consideráramos la Tasa de desocupación ocurre lo inverso. Habrá algo más de 55 desocupados cada 100 personas de los 31 conglomerados. De ellos la inmensa mayoría son de los niveles educativos más bajos.

Está claro que el nivel educativo alcanzado incide sobre la posibilidad de estar ocupado o desocupado. Hacer que el Dios Mercado oriente la educación es quitar posibilidades de alimentos y aumentar la pobreza. Los ajustadores, privatistas y entreguistas proponen eso. Eliminar el hambre con más hambre, eliminar la pobreza generando más pobreza.

Sólo el 24% de los argentinos, es decir 1 de cada 4, logró completar estudios terciarios o universitarios. Ese porcentaje lo ubica muy por debajo del promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), pero por encima de varios países de Latinoamérica. Para comparar, el promedio de la OCDE, es de 41% de personas con al menos estudios terciarios completos. En la Argentina ese indicador es del 24%, pero le alcanza para superar a otros países de la región como Colombia (22%), Brasil y México (ambos con el 21%). Pero Canadá encabeza la lista de OCDE con 61% de graduados terciarios y universitarios, incluyendo maestrías y doctorados (postgrados).

En este análisis, es importante poner el foco en el acceso a la educación, ya que sin formación previa no hay educación superior. Allí se observa que, entre los niños de 6 y 14 años, la tasa de enrolamiento educativo es del 100%, de acuerdo con los datos de la OCDE que releva el estudio. Entre los 15 y los 19 años, en cambio, hay un descenso marcado: la tasa de inscripción desciende al 76% ubicando a la Argentina en el puesto 35 de 41 países relevados.

“Quienes no completan sus estudios secundarios ven fuertemente restringidas sus oportunidades de desenvolverse con éxito en el mercado de trabajo formal, porque hoy es un requisito mínimo de acceso. Pero, además, al no acceder a estudios superiores, empeoran sus perspectivas ya que mayor nivel educativo suele relacionarse con mejores empleos”, sostiene Claudia Romero, Doctora en Educación y Profesora e investigadora de la Universidad Di Tella.

https://www.utdt.edu/ver_nota_prensa.php?id_nota_prensa=21099&id_item_menu=6 

 

Otro dato que llama la atención, son las tasas de enrolamiento en el nivel terciario para los grupos de 18, 19 y 20 años. De acuerdo con los datos disponibles, apenas alcanzan el 48%, 47% y 42% respectivamente, colocando a nuestro país en el puesto 37 sobre un total de 41 países. Si además tenemos en cuenta que sólo contamos con un 24% de graduados del nivel superior entre la población adulta, podemos concluir que no sólo hay una falla en el ingreso al nivel superior, sino que también se percibe una importante dificultad para sostener una carrera terciaria o de grado.

Milei, sus socios del grupo ultrarreaccionario, con el aporte sustantivo de Macri, proponen un cambio para profundizar la Argentina de la oligarquía. Sumisa, indefensa, con un pueblo hambreado y sin derechos.

Milei propone la libertad total de los que usufructúan esta Argentina dependiente, oprimida, entregada. El zorro comerá libremente en el gallinero. No habrá límites para el festín. Macri quiere volver a la década infame. Milei propone volver a la Colonia y el feudalismo. Por eso su socio Marras dijo que los buenos, en la Guerra por nuestra Independencia, eran los españoles. Admiran a Churchill y a la Thatcher, concilian con los ingleses reconociendo a los Kelpers como población autóctona y no como población trasplantada por el usurpador inglés. Macri dijo que el libertario tiene "buenas ideas". Y, presuroso, está incorporando gente de su confianza en su posible futuro gabinete. Procesistas negacionistas, menemistas entregadores, macristas, se atropellan en manada para lo que suponen va a ser un festín de entrega y ajuste… y de jugosos negocios para ellos y sus asociados imperialistas de todo pelaje.

En las elecciones y en las calles, más tarde o más temprano vientos de pueblo barrerán tanta basura.

 

CIENCIA, TECNOLOGÍA E INDEPENDENCIA

Las fuerzas productivas de un país están compuestas por los medios de producción (las máquinas) y los seres humanos que trabajan en ellas. Sin embargo, en nuestro concepto, son los seres humanos el elemento principal de las fuerzas productivas de ese país. Si esto es así, la capacitación y la educación de ese ser humano son elementos sustanciales para el desarrollo industrial (y también agrario) del mismo.

Conviene detenernos en algunas definiciones:

¿Qué es tecnología?

Etimológicamente proviene de dos palabras griegas: techne que quiere decir arte y habilidad aplicada y logos que quiere decir conocimiento.

Pero, de inmediato, surgen preguntas:

¿Tecnología es sólo el artefacto o la máquina (“hardware”)? ¿Y el software no es tecnología?

Hoy se reconoce que hay tecnologías duras (las primeras) y blandas (las segundas). Entre estas tecnologías “blandas” hay tecnologías de comercialización, de logística, de distribución, de diseño y evaluación de proyectos sociales, etc.

¿Y dónde reside la tecnología? ¿Sólo en la máquina o también en el ser humano? ¿Y si residiera principalmente en el ser humano? ¿Sirve el mejor instrumento sin el ser humano capaz de manejarlo? En el inicio ¿quién diseña y construye ese instrumento sino es el ser humano?

Sería de desear que, el objetivo final de lo que se planifique, sea el ser humano, no un grupo pequeño de ellos. En nuestro caso los habitantes de nuestra Patria. Nuestros hermanos y no un puñado de ellos (un grupito de lobos insaciables) que usufructúan la vida invivible de la mayoría.

Tomemos a un tecnólogo, ya fallecido, de ideología desarrollista como Jorge A. Sábato. Para él, tecnología era “el conjunto ordenado de conocimientos necesarios para la producción y comercialización de bienes y servicios”. También se la suele definir como un complejo de conocimientos, métodos y materiales usados en hacer una cierta clase de técnica para la producción y comercialización de bienes y servicios. Sin embargo, nos atrevemos a afirmar que lo principal de la tecnología reside en la cabeza de los ser humano (conocimientos y métodos).

Aunque es poco reconocido, ese ser humano que trabaja en la máquina también actúa como productor de innovación tecnológica.

Hace más de cuarenta años (principios de la década del ´70) un investigador llamado S. Hollander efectuó estudios de productividad en cuatro establecimientos productores de rayón de Dupont en EE.UU. Sus conclusiones fueron sorprendentes. Introducida una nueva tecnología, cambios técnicos menores producidos por quienes operaban las máquinas eran responsables de casi dos tercios de la reducción de costos unitarios atribuibles a cambios tecnológicos. Este proceso de mejoras, obra de los operarios, llegaba a manifestarse hasta diez años después de la introducción de la nueva tecnología.

Todo lo anterior habla del papel del ser humano en el desarrollo de las fuerzas productivas y de la necesidad, por lo tanto, de su capacitación como parte fundamental del desarrollo productivo.

Pero el desarrollo científico y técnico no nos independizará. Un cambio revolucionario posibilitará el desarrollo Científico y Tecnológico. Sin embargo, debemos proteger y defender el desarrollo científico y tecnológico argentino logrado. Ese desarrollo científico-técnológico fue fruto de años de lucha, no de evolución natural y tranquila. Aquí también vale lo defender lo logrado y luchar por lo que falta.

Es importante tener en cuenta que la tecnología no es de validez universal. Las distintas tecnologías dependen del contexto y las necesidades concretas que deben resolver. De allí surge el concepto de Tecnología apropiada de la OIT, la OMS y la ONU. Una tecnología, para responder a tal calificación, debe tener tres características. Debe ser:

1) científicamente válida,

2) técnicamente eficaz y

3) socialmente aceptable.

 Lo anterior significa que no basta con el carácter científico de la misma, sino que debe lograr los efectos esperados en el lugar donde se aplica, en la máxima cantidad en relación con los medios utilizados. Pero, además, debe corresponderse con el proyecto social global del lugar donde se aplica. Ergo, no hay tecnología de validez universal. Debe ser evaluada en función, en nuestro caso y en nuestra opinión, de un proyecto nacional y social de independencia nacional y soberanía popular

En suma: como se dijo, lo fundamental es el ser humano que opera las máquinas. Por eso es necesaria su educación técnica, en función de un determinado proyecto de país y las necesidades de su pueblo. El punto de partida para analizar este tema es definir en que mundo vivimos:

No vivimos un mundo “globalizado” de países respetuosos de los derechos de los demás países, interdependientes, como se dice ahora, sino que estamos en un mundo en que los países no son iguales.

Hay un pequeño número de países opresores y una mayoría de países expoliados y limitados en su soberanía, por los primeros. Y Argentina pertenece a los pueblos, naciones y países expoliados.

La incomprensión de esta cuestión esencial hace que algunos imaginen a Argentina como aliada a nuestros enemigos sin comprender que el esclavo nunca conseguirá su libertad como aliado del amo. Se pregona así una política de buena letra, para congraciarse con los dominadores, que nos ha llevado a la situación actual. En realidad, es una política de sumisión e indefensión nacional.

Como esto es así, nuestra independencia exige dominar todas las etapas de la producción (desde la investigación científica, el desarrollo tecnológico apropiado y la elaboración de bienes y servicos) y controlar los efectos esenciales de la misma, ya que lo contario nos hará débiles, presionables, vulnerables.

Ser independientes es de interés del Pueblo y de la Patria. No es sólo una definición ideológica.

Pero esto exige un adecuado presupuesto. Es hora de hablar de los fondos necesarios.

La cuestión del estímulo a la investigación científica y tecnológica nacional y del porcentaje del PBI necesario es un tema a considerar.

El promedio mundial del porcentaje de PBI dedicado a Ciencia y Técnica, según cifras del Banco Mundial, es del 2,27 %, con datos de 2017 y 2018. (Chequeado.com). Argentina ha avanzado en este rubro. Entre 2019 -último año del gobierno de Mauricio Macri- y 2022 la función “Ciencia y Técnica” del presupuesto nacional se recuperó, pasando del 0,23% del PBI al 0,29%. Para 2023 la inversión estimada alcanzaría el 0,34% del PBI, en cumplimiento de lo que dispone la Ley de Financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia. Pero recién en 2032, llegaríamos al 1% de nuestro exiguo PBI. Es decir, menos de la mitad del promedio mundial y la cuarta parte del porcentaje de los países que encabezan la tabla de posiciones (que tienen más del 4% del PBI). Esto debe cambiarse. Este es otro tema para luchar por lo que falta.

 

LA UNIVERSIDAD: Problemas de acceso y permanencia

Argentina ofrece educación pública, gratuita y obligatoria en los niveles primario y secundario. Y una Universidad Pública gratuita. Crece el número de universidades cerca de donde vive la población y esto facilita el acceso (disminución de costos de viaje, alquiler y comida). Muchos de los estudiantes de estas nuevas universidades son los primeros universitarios en sus familias.

Sin embargo, lo anterior no evita la baja tasa de graduados de Argentina.

Reiterando cifras presentadas más arriba, según datos del Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA) de la Universidad de Belgrano en base a información publicada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que data de 2021, sólo el 24% de los argentinos, es decir 1 de cada 4, logró completar estudios terciarios o universitarios. Ese porcentaje lo ubica muy por debajo del promedio de la (OCDE), aunque por encima de varios países de Latinoamérica, como Colombia (22%), Brasil y México (ambos con el 21%). Dentro de Latinoamérica queda por debajo de Chile (31%) y de Costa Rica (25%). El promedio de la OCDE, que se compone en su mayoría de países desarrollados es de 41% de personas con al menos estudios terciarios completos.

Argentina en ese ranking se ubica en el puesto 36 entre 44 naciones que fueron incluidas en el listado. (INFOBAE, febrero de 2023). Según el artículo mencionado, en la Argentina, el nivel educativo alcanzado por el mayor porcentaje de la población de 25 a 64 años de edad es el secundario completo, con el 42%. Y que, menos de 6 de cada 10 jóvenes de entre 18 y 24 años completó el secundario.

De hecho, solo 6 de cada 10 de los nuevos inscriptos llega a completar el primer año universitario. Luego, con el correr de los años, la matrícula continúa en caída hasta cifras muy bajas de obtención del título.

Si se agrupa a la población que no logró terminar la educación obligatoria, las cifras alcanzan al 33 por ciento. En ese apartado, el país ocupa el lugar 32 del ranking mencionado

Contrastando con lo anterior, en 1950, 1 de cada 3 estudiantes universitarios en América Latina era argentino.

“Hoy por hoy hay un problema de origen. Pobreza, por un lado, un mal sistema de retención de alumnos en el nivel secundario. Puntualmente estudiantes que abandonan y un Estado no sale a identificarlos y a buscarlos para que regresen. Sumémosle la mala formación que reciben en el secundario, docentes secundario no muy bien formados para enfrentar la situación”, afirma en el artículo de INFOBAE, Marcelo Rabossi, investigador de la Universidad Torcuato Di Tella.

Es que la Universidad abierta el pueblo sólo es posible como un aspecto (referido al ingreso, permanencia y egreso) de la que será la Universidad del Pueblo Liberado en una Argentina Independiente que comprende, además, otros aspectos ligados al contenido pedagógico y curricular de la Enseñanza y la Investigación, su vinculación con necesidades populares y nacionales e, incluso, con formas organizativas distintas. Que será parte de un programa o proyecto nacional integral de más derechos cumplidos para el Pueblo en una Argentina independiente de toda dominación extranjera.

Porque esta Universidad del Pueblo liberado y de Argentina Independiente de toda dominación extranjera es parte del Programa de una Revolución Democrático Popular, Agraria y Antiimperialista con un nuevo Estado de Democracia Grande del Pueblo, por y para el Pueblo.

Las preguntas que deben (debemos) hacerse diariamente son:

¿Cómo se universaliza el estudio como derecho del pueblo?

¿Qué se enseña y qué se investiga?

¿Cómo se enseña y cómo se investiga?

¿Con qué prioridades y con qué fines?

¿Cuáles son los fondos presupuestarios que hacen falta y de quienes y cómo deben obtenerse?

En ese camino, debemos defender lo que tenemos y avanzar el lo que es necesario. Lo que es necesario hoy, incluye cerrarle el paso a esa derecha ultrareaccionaria.

Ramón Carrillo decía que no puede haber medicina sin medicina social y no puede haber medicina social sin un proyecto social del Estado. De la misma manera no puede haber Educación si no es concebida como una necesidad impostergable para el Pueblo y para la Patria independiente. Una educación como derecho del pueblo, gratuita, obligatoria, y parte de un nuevo Estado de Democracia Grande. La lucha debe enmarcarse en el camino a hacia ese nuevo proyecto revolucionario nacional y popular.

La cuestión educativa es un problema integral. El ingreso y la permanencia de estudiantes en el ciclo universitario implica condiciones sociales adecuadas. La pobreza, la exclusión económica, cultural y geográfica, en fin, las condiciones de vida, son causales abandono del proceso educativo. No se puede resolver la cuestión universitaria desligada de un proyecto que contemple la educación primaria y secundaria.

También entra en juego el contenido de la enseñanza y la investigación científica de los centros universitarios. Hace unos 50 años, siendo estudiantes universitarios, pensábamos que había un trípode en el que se asentaba el proyecto universitario.

Las patas de ese trípode eran: la cuestión democrática, la cuestión pedagógica y científica y la cuestión presupuestaria:

a. La cuestión democrática era y es el acceso, la permanencia y egreso para todos, al intentar una carrera universitaria. La limitación a eso son todas aquellas medidas que impiden el acceso a la universidad por razones económicas, geográficas, culturales, organizativas, etc. y es el principal problema democrático en la educación.

Son los exámenes de ingresos, horarios que no contemplan a los que trabajan, cátedras filtro que impiden el ingreso y permanencia en la Universidad, etc.

Más aún, hacen falta medidas que contemplen que los que deben abandonar la carrera universitaria no lo hacen por desidia o vagancia. Las principales causas son la necesidad de trabajar largas horas para mantenerse, el fallecimiento de alguno de los sostenes de familia, el grupo familiar al que hay que mantener, incluidos los hijos de los propios alumnos y alumnas, la trayectoria histórica de pobreza familiar. Y también, debe decirse, dificultades en la formación previa por déficits en la enseñanza primaria y secundaria.

La lucha por la participación estudiantil en el gobierno de universidades y por la conducción de los centros de estudiantes es una forma (que no debe ser despreciada) de incidir en las decisiones para impedir esa limitación e imponer una docencia e investigación ligadas a las necesidades del Pueblo y de la Nación, con el presupuesto necesario. Las agrupaciones estudiantiles y docentes no deben ser un mero apéndice de partidos políticos, son verdaderos frentes únicos contra el enemigo principal y sus objetivos en cada momento.

Plantear la participación estudiantil en el gobierno de la universidad separada de la lucha contra las dificultades de acceso y permanencia, por un contenido de la enseñanza y la investigación popular, patriótico, democrático y científico y por el presupuesto para ello, es alejarla del interés de la mayoría. Hace que los estudiantes no la vean como propia sino como el objetivo de un grupo de activistas. En ese sentido los Centros de Estudiantes no deben reducirse a ser vendedores de apuntes, ni limitarse a ser gestores ante las autoridades para solicitar alguna reivindicación. Deben ser organizadores democráticos de la lucha por conservar lo logrado y conquistar nuevos derechos.

b. La cuestión pedagógica y científica comprende el contenido de la enseñanza y la investigación. Y aquí aparece la cuestión de la política científica y educacional. Si política es la ciencia (para ubicar causas, efectos y leyes) y el oficio (o capacidad para llevar a la práctica un plan) para hacer posible lo necesario para el Pueblo y la Patria; una política científica y educacional es hacer posible la educación y la ciencia para las necesidades del pueblo en una Argentina independiente.

Es la política universitaria del pueblo liberado y la patria independiente.

Es la política universitaria de la Revolución de Nueva Democracia, de la etapa democrático popular, agraria y antiimperialista. No es socialista de inicio sino la primera etapa en el camino ininterrumpido al socialismo.

En los setenta teníamos un ejemplo que, decíamos, si se resuelven las contradicciones que encierra se resuelve el proyecto educacional que deseamos.

El ejemplo era el siguiente:

En Florencio Varela estaba el Centro de Investigación en petróleo (de la YPF estatal) más grande de Suramérica. En Ensenada estaba una de las destilerías más grandes de Suramérica. Y en la Universidad Nacional de La Plata no había ingeniería en petróleo. Nosotros pensábamos que los científicos que trabajaban en el Centro de Investigación de YPF debían ser los docentes de esa carrera de ingeniería, la carrera debía integrarse con la práctica en la destilería y los obreros de ella también podrían estudiar allí. Era nuestra idea de la integración de la producción, la docencia y la investigación. Y del acceso de los obreros a la universidad.

Hoy se dirá que esto era “utópico”, pero nosotros nos basábamos en ejemplos reales nacionales y extranjeros. El Astillero de Río Santiago tenía una escuela secundaria donde se formaban hijos de los obreros de la empresa que después entraban a trabajar en ella y, por esos años, en la China de Mao (no la imperialista de ahora), la Fábrica de Máquinas Herramientas de Shangai formaba como ingenieros a sus obreros y eran mejores, se decía, que los de la Universidad de Pekín.

Por esos años se destacaba el método de evaluación de los ingenieros electrónicos que se recibían en China de Mao (no la actual socialista de palabra e imperialista en los hechos): debían armar una computadora para recibir el título. Esto era lo que nosotros queríamos decir cuando planteábamos que la práctica es la madre de la teoría y que la capacidad de transformar la realidad es el criterio de verdad de cualquier teoría.

Los Centros de Investigación Científica que sean capaces de producir, deberían hacerlo en la medida de sus posibilidades, una vez asegurados los requerimientos de la enseñanza y de la investigación científica. Tal vez pudieran constituir plantas piloto de producción en tecnologías de punta. Algunas plantas de producción de medicamentos actuales en Universidades surgieron de estas ideas de esa época. Algunas universidades se plantean objetivos de este tipo en la actualidad. Deben hacerlo integrando enseñanza, investigación y producción, pero no al servicio de empresas monopólicas privadas sino como forma de transferencia a un sector estatal poderoso y a PYMES nacionales y pequeños productores agrarios. No es nada nuevo. Esto se llama Enseñanza e Investigación Traslacional (porque intenta el “traslado” o transferencia de conocimientos nuevos).

Es preciso investigar qué relación hay entre la teoría y la práctica en educación, qué enseñanza debe haber en ciencias físicas, químicas y biológicas y en ciencias sociales. ¿Qué enseñanza en cultura y arte? ¿Plantear la filosofía como una suma de debates abstractos de ideas o vincularla a los procesos históricos políticos y sociales en cada momento? ¿Plantear la historia como una sucesión de hechos memorables con individuos destacados? ¿O, todo lo contrario, relacionarlas con la historia de las formaciones económico sociales y la lucha de clases en cada momento. En suma: ¿cómo y qué enseñar…?

Esta era una gran preocupación para nosotros, jóvenes estudiantes, profesionales y científicos de los setenta.

¿Cuántos temas se estudian sin haber visto jamás aquello de lo que se habla y alejados de toda práctica? ¿Cuántas definiciones generales sin ni siquiera haber visto el objeto de estudio?

Es una forma de enseñanza que no parte de la práctica. Por lo tanto, es difícil y mala.

c. La cuestión económica es el presupuesto necesario para todo lo anterior buscándolo en los bolsillos de los principales enemigos del Pueblo y de la Patria en cada momento. 

Esto vincula las reivindicaciones universitarias con el proyecto de país y con las reivindicaciones patrióticas y democráticas del conjunto del pueblo.

 

¿DÓNDE ESTÁN LOS FONDOS NECESARIOS?

Debemos promover, con los fondos necesarios, el desarrollo educacional, científico y tecnológico independiente. El dinero necesario, en promedio, desde la planificación inicial de una vacuna hasta que ésta se coloque en el brazo de un humano, se estima en 1.000 millones de dólares.

¿Es mucho? ¿Y si lo comparamos con el dinero que exige el FMI para pagar una deuda externa usuraria, fraudulenta, ilegítima y odiosa? ¿O con la subfacturación de exportaciones (contrabando) en la mal llamada Hidrovía (Río Paraná)? ¿O con la sobrefacturación de importaciones, a dólar oficial, de las filiales de monopolios extranjeros desde sus casas matrices? ¿O con la renta de los latifundistas (en gran medida extranjeros y en zonas de importancia estratégica) que impiden el acceso a la tierra de los campesinos productores?

Las Megamineras pagan ínfimas regalías y contaminan. Los buques factoría extranjeros rapiñan nuestro mar. Monopolios extranjeros usufructúan nuestro petróleo. Se extranjerizan nuestras tierras fértiles. Se paga una deuda externa ilegítima, usuraria, odiosa y fraudulenta. Las ganancias financieras se multiplican, etc. etc. Es la depredación del pueblo y de la patria.

En estos y otros lugares está el dinero necesario.

El sistema educativo actual tiene como víctimas a los que no pueden acceder a él y a los que lo sufren en él: los alumnos y los docentes. Sus reivindicaciones (no sólo lo salarial o las mínimas y esenciales soluciones cotidianas) son parte del programa de lucha. Incluyen lo pedagógico y lo científico: a quiénes enseñar, qué enseñar, cómo enseñar y con qué condiciones enseñar. Y con que dinero hacerlo.

No es mucho dinero, si comprendemos que es más importante el interés del Pueblo y de la Patria que los intereses mezquinos de los que siempre ganan. Porque, insistiendo en lo que ya se escribió más arriba, de los dos elementos que componen las fuerzas productivas de un país (las máquinas, aparatos y los dispositivos y el ser humano que trabaja con ellos), el elemento más importante es el ser humano. Ese ser humano en el que, parafraseando a Ramón Carrillo, reside la verdadera Nación.

 

LA ESCUELA SECUNDARIA

La enseñanza en los niveles primario y secundario es un tema inseparable de lo analizado sobre la universidad. Todos estos datos llevan a concluir que el gran talón de Aquiles del sistema es el Nivel Medio, aunque seguramente esta debilidad tenga que ver con los problemas que arrastran de los niveles anteriores. De todos modos, es en el nivel secundario donde se pierde la mayor cantidad de matrícula. Además, por los datos de acceso al nivel posterior, podemos inferir que, o bien los alumnos no terminan el secundario, o lo hacen de forma deficitaria por lo que no cuentan con las herramientas necesarias para encarar un nuevo nivel de estudios o, simplemente, no sienten la motivación suficiente para seguir haciéndolo.

https://www.mdzol.com/sociedad/2023/2/20/el-dato-que-revela-la-crisis-de-la-escuela-secundaria-en-la-argentina-315922.html

Encuestas realizadas por especialistas, hacia el año 2010, a estudiantes, padres y empleadores mostraban resultados preocupantes en lo referente a enseñanza técnica secundaria. Se advertían deficiencias que, en opinión de los encuestados tenías causales diversas, a saber:

·         Situación económica de los alumnos

·         Metodología utilizada por los profesores

·         Deficiencias en la formación del cuerpo docente

·         Base insuficiente en Ciencias Básicas

·         Falta de técnicas y horas de estudio

·         Falta de actualización de contenidos

·         Disminución de horas de taller y laboratorio

·         Falta de conocimiento de herramientas y software actuales

Parecen continuar estos cuestionamientos.

Las opiniones recogidas por los investigadores citados reflejaban disconformidad respecto a la formación como técnicos competentes cuyas capacidades están basadas fuertemente en el conocimiento científico y en el “saber hacer”, logrados en las prácticas de laboratorio y en los trabajos de taller. También había, y hay, un crecimiento en la disconformidad respecto a los métodos utilizados por los profesores, la falta de técnicas y horas de estudio y en la formación del cuerpo docente, como causas que afectan y afectaron la adquisición de competencias.

La segunda problemática, percibida especialmente por los egresados, fue la disminución de horas de taller y de laboratorio. Según algunos trabajos de investigación las encuestas indican la necesidad del “saber hacer” que habilite para el mundo del trabajo, íntimamente relacionada con el “saber” científico”, es decir, con la práctica que debe estar enraizada en el conocimiento para poder analizar e interpretar correctamente resultados y la capacidad de transferirlos a otros ámbitos.

Los empleadores encuestados se quejaban de la falta de conocimiento, por parte de los técnicos, de las herramientas y software actuales, lo que manifestaba la falta de capacidad de la escuela de seguir los cambios tecnológicos por la falta de adecuación de los profesores, así como por las posibilidades y los recursos con los que cuentan las escuelas técnicas, muy inferiores a los de las industrias. Tanto profesores como alumnos perciben como un refuerzo sumamente necesario las pasantías o “prácticas profesionalizantes” en los lugares de trabajo.

La situación de la enseñanza técnica es parte de la destrucción de la capacitación de la mano de obra, continuidad de la destrucción de la industria nacional independiente. Parte de ello es la flexibilización laboral, el trabajo multifunción en lugar del oficio y la especialización.  ¿Para qué haría falta la formación técnica en un país primarizado? ¿Para qué invertir en ella si finalmente la mayoría quedará desocupada y los que consigan trabajo no lo harán por dicha formación?

La consecuencia actual es la superexplotación de los más jóvenes y desaprovechamiento de la experiencia de los mayores, con desocupados estructurales. Y tres generaciones sin trabajo estable, en algunos sectores, junto a jóvenes que no estudian ni trabajan y que no tienen posibilidad de adquirir habilidades prácticas mínimas.

Y, por último y no menos importante, se va perdiendo el carácter del trabajo como ordenador de vida e integrador social, como actividad creadora. Así se generaron y se generan las condiciones para la drogadicción, la trata de personas, la lumpenización. La destrucción de la Educación Pública, y de las Escuelas Técnicas en particular, se desarrolla, desde este punto de vista, con tal coherencia que es difícil no sospechar de la intencionalidad de sus promotores.

¿Qué tipo de enseñanza?

Debe relacionar adecuadamente la práctica y la teoría.

Decía Mendeleiev (No se podría enseñar química, hoy, prescindiendo de sus aportes. De misma manera que ocurriría con Newton o Einstein en la enseñanza de la física):

“La concepción teórica que no equivale y no corresponde a la realidad, a la experiencia y a la observación, es simplemente ejercicio mental o incluso puro absurdo y no tiene el derecho al título de ciencia. Ciencia, en el sentido estricto de la palabra, se puede llamar hoy solamente lo que expresa la concordancia de la teoría y la práctica.”

Es preciso partir de la práctica. La capacidad de verificarse en la práctica es el único criterio de verdad.

Debe combinarse la enseñanza con el trabajo productivo partiendo de la práctica, e ir al conocimiento racional que debe ser comprobado nuevamente en la práctica.

¿Qué son los conocimientos adquiridos por los estudiantes en los libros? Suponiendo que todos esos conocimientos sean verdaderos, son teorías elaboradas por los que nos precedieron basándose en la suma de experiencias, no son conocimientos extraídos por los mismos escolares. Es indispensable asimilar esos conocimientos; sin embargo, hay que tener en cuenta que, en determinado sentido, son para los estudiantes conocimientos obtenidos y comprobados por otros. No los han comprobado los mismos estudiantes. Además, lo más importante es saber aplicarlos en la vida y en la práctica. Desde ya será muy peligroso si los alumnos se quedan contentos sólo con su experiencia. En ese caso les faltará teoría y, en consecuencia, también tendrán conocimientos relativamente incompletos.

 

CUATRO NUDOS PARA LA EDUCACIÓN SECUNDARIA.

Estos nudos a contemplar son:

a) Igualdad de acceso.

Este es el principal problema democrático de la educación. No debe haber limitación de ingreso ni expulsión de la escuela: la educación es un derecho inalienable.

Debe ser de tiempo completo con comedor incluido. Sería interesante promover una especie de “Escuela-Club de barrio” que iguale las oportunidades y vincule e integre socialmente. Sería un arma clave contra la droga, el delito y la “lumpenización”.

Una “Escuela-Club de barrio” que sea el lugar donde el joven encuentre el conocimiento teórico-práctico, con las inmensas posibilidades multimedia del presente, con laboratorios de capacitación práctica y, también, el lugar de esparcimiento, deporte y extensión cultural y artística, de encuentro y actividad social junto a sus coetáneos.

b) Contenido de la enseñanza. Práctica y teoría. Técnicos y Oficios.

Es preciso formar Técnicos para la informática, la metalmecánica, la construcción, la producción agropecuaria, la salud, etc. produciendo mano de obra capacitada.

El Uribelarrea (Pcia. de Bs. As.) existe la Escuela Agrotécnica Salesiana “Don Bosco”. Emite títulos de Bachiller Agrario (6to. Año) y Técnico en Producción Agropecuaria (7mo año). ¿Por qué el Estado no puede reproducir lo que hicieron los salesianos? ¿Por qué no puede reproducir el ejemplo de la Escuela del Astillero Estatal de Río Santiago (Provincia de Bs. As.)?

Lo anterior debe incluir la capacitación en el lugar trabajo y la educación continua.

La Escuela Técnica debe sumarse a la formación en artesanías y oficios de jóvenes y mayores para recuperar con rapidez la mano de obra destruida en estas décadas. El desarrollo de una industria de la recuperación, el arreglo y el reuso de productos es importante para proveer a la población de bienes de uso con menos descartables y menos residuos contaminantes, que sea más amigable ambientalmente. El ciclo de formación debe ir desde oficios a técnicos llegando, en ciclos sucesivos, hasta la formación profesional.

No decimos nada nuevo: sostenía el General Perón refiriéndose a las escuelas técnicas, escuelas fábricas y preanunciando la UTN: “hemos pensado muchas veces que cuando un país inicia su industrialización, no puede realizarla solamente con buena voluntad. La Nación no ha de escatimar esfuerzos cuando se trate de capacitar a sus hijos para hacer grande esta tierra. Vamos a crear universidades técnicas. Aspiramos a que los futuros técnicos que han de tomar la dirección del país, salgan de estas escuelas de trabajo. Queremos que nuestros obreros, formados en las actuales escuelas de enseñanza técnica, puedan completar un ciclo total de aprendizaje.”

(Otegui, José María. El General Perón fundador de las Escuelas Fábrica y de aprendizaje. Editorial FAC. Buenos Aires. 1982.)

c) Aprender produciendo en pequeña escala.

Como en la Universidad, los alumnos deben poseer algo más que conocimientos librescos, también deben participar en el trabajo productivo. Sería bueno, acá también, considerar la posibilidad de laboratorios y fábricas que dependan de escuelas y centros politécnicos como unidades piloto de producción en pequeña escala y en proyectos de punta con el concepto de investigación científica traslacional o de transferencia científico-tecnológica definidos para el ámbito universitario.

d) Presupuesto, cargos y salarios.

Desde ya todo lo expresado exige un presupuesto, los medios y los cargos necesarios con retribución justa y el tiempo de dedicación necesaria. El sistema educativo argentino tiene dos víctimas: el alumno y el docente. Y, por carácter transitivo a través de ellos, la Nación.

 

ALGUNAS IDEAS SOBRE CONTENIDOS.

Decía Otto Krause en 1897

“los estudios técnicos se han de dividir en teóricos, de experimentación física, de laboratorio, de tecnología y de trabajos manuales. Los primeros solamente en la medida necesaria para comprender los principios que rigen las operaciones tecnológicas. Se han de aplicar los métodos más modernos y abreviados que permitan en poco tiempo adquirir los conocimientos esenciales”.

Los ejes en los cuales se podría construir el programa de enseñanza podrían ser:

A) El eje de ciencias básicas.

Matemáticas, Física, Química, Biología, pero los contenidos enseñados deben girar alrededor del eje práctico del área técnica decidida en cada caso. Recalcamos: la materia alrededor del eje práctico y no en general. El concepto pedagógico debe intentar lograr que el alumno adquiera la capacidad de aprender de sus errores y sus aciertos y de los errores y aciertos ajenos y que adquiera capacidad para buscar soluciones a los problemas que se le planteen. Principalmente hay que lograr desarrollar su capacidad de buscar soluciones concretas y no sólo llenar su memoria de conocimientos indirectos.

B) El eje histórico-geográfico.

No se trata de obtener una máquina técnica humana sino un técnico con la comprensión ideológica patriótica y democrática que le permita una disciplina consciente. Debe conocer la historia y la geografía física, política y económica de Argentina y su relación con el mundo y la historia de las ideas, la filosofía y las artes en cada contexto y simultáneamente. El Homo sapiens aislado no existe. Sólo existe en un lugar geográfico, histórico y social concreto. Debiera incluirse un eje sobre patrimonio nacional, su desarrollo y su defensa, para que conozca las grandes experiencias llevadas a cabo en nuestro país: el petróleo, la siderurgia, los ferrocarriles, la riqueza marítima, la energía atómica, el Pulqui II, el Misil Cóndor, el Rastrojero, la Estanciera, etc. No partimos de cero. Partimos de experiencias logradas.

Es más, lo que nos han impedido hacer que lo que no pudimos hacer. Y lo debemos saber. La amnesia histórica es parte de nuestra opresión nacional. Cómo decía León Tolstoi: “Pinta tu aldea y serás universal”.

 

A MODO DE EPÍLOGO

Decía el Manifiesto Liminar de la Reforma Universitaria de 1918:

Los dolores que quedan son las libertades que faltan. Creemos no equivocarnos, las resonancias del corazón nos lo advierten: estamos pisando sobre una revolución, estamos viviendo una hora americana

Las medidas necesarias exigen una Revolución para dar vuelta la situación a favor de los que siempre pierden. Una Revolución Democrático Popular, Agraria y Antiimperialista con un nuevo Estado de Democracia Grande del Pueblo, por y para el Pueblo. Con las Malvinas recuperadas y con su integridad territorial completa, en una Argentina independiente de toda dominación extranjera, como reza el Acta de nuestra Independencia de 1816. Independiente de todos los bandos imperialistas, en camino ininterrumpido a un futuro donde no haya un puñado de seres humanos que sean lobos de otros seres humanos y en un mundo donde no haya un puñado de potencias que rapiñen a pueblos, países y naciones oprimidos y dependientes.

 

APÉNDICE I

LA REFORMA UNIVERSITARIA - 15 DE JUNIO DE 1918

Hace tiempo George Orwell escribió: “Quién controla el pasado controla el futuro y quién controla el presente controla el pasado”. Parece pertinente disputarle, a quienes controlan el presente, el control del pasado para recuperar el futuro de nuestro pueblo y nuestra Nación. No me refiero al actual gobierno sino, más en general, a los sectores económicos y sociales que han sido causantes y beneficiarios de las políticas de hambre, entrega y sumisión nacional, expresado hoy en el núcleo estridente de Milei-Macri junto a procesistas, menemistas, etc.

Queremos hablar de la actualidad de aquel movimiento que fue, hace 105 años, la Reforma Universitaria. Que no fue un hecho aislado, sólo universitario. Tuvo un contexto del cual no se puede separar.

Eran las épocas de la revolución mexicana con los líderes agrarios como Pancho Villa y Emiliano Zapata y la Revolución Rusa de 1917. Eran las épocas de fines de la primera guerra mundial que había puesto de manifiesto el fracaso del modelo liberal oligárquico de la Generación del 1880, evidenciando nuestra dependencia nacional, similar a lo que pasa hoy y donde un joven coronel Mosconi comenzaba su lucha por la independencia energética.

Eran épocas de auge de luchas obreras desde 1917 a 1922. La Semana Trágica y La Patagonia Rebelde. Y en la Patagonia había terratenientes de nombres tradicionales y otros eran ingleses en una situación similar a la de hoy donde la extranjerización de la tierra hace que Benneton sea dueño de un millón de hectáreas en la Patagonia. Y el magnate inglés Lewis sea dueño en el paralelo 41 de un aeropuerto de tamaño del de la Ciudad de Buenos Aires, con capacidad para permitir el aterrizaje de aviones de guerra provenientes de las Malvinas usurpadas y colonizadas por los británicos, dividiendo a la Argentina continental en dos. Inglés Lewis de notoria amistad con Mauricio Macri.

Era la época del ascenso al gobierno del Yrigoyenismo (que simpatizaba con ese movimiento estudiantil).

Las banderas de la Reforma del ´18 eran la democratización de la enseñanza, la libertad de cátedra, la docencia libre y las cátedras paralelas, la periodicidad en las cátedras con concursos públicos, la asistencia libre y la gratuidad de la enseñanza, la participación de los estudiantes en el gobierno, la autonomía universitaria como método para independizarse de las oligarquías que detentaban el verdadero poder del estado en Latinoamérica, la profundización de la investigación con método científico, la comunicación con la sociedad a través de la vinculación de la universidad con el pueblo.

Y este movimiento con estas consignas se extendió a toda América, preocupando y enfrentando a las oligarquías nativas.

Pero cuando vemos hoy el estado de nuestras universidades, de nuestra educación, podemos concluir que la Reforma quedó inconclusa. Lo más notorio es que mayorías de los sectores más empobrecidos ven imposibilitado el acceso a la educación. No ingresan los que quieren, ingresan los que pueden. Y permanecen en la Universidad aquellos que tienen condiciones económicas para afrontar el gasto.

Persiste una eterna carencia presupuestaria. La realización de servicios para grandes empresas monopólicas, que no son de interés nacional, para conseguir fondos, deforma el objetivo de las altas casas de estudio.

En primer lugar, no estamos de acuerdo con la teoría de la aristocracia de los inteligentes, con la selección de los mejores, con la teoría de la selección de los genios tan de moda. El homo sapiens tiene la misma capacidad intelectual desde que evolucionó en la faz de la tierra. La diferencia está en la capacidad de desarrollar sus aptitudes y la culpa de que esto no ocurra es del sistema económico social, que no da igualdad de oportunidades a todos, sometiendo a niños a trabajo embrutecedor, a mendigar alimentos y hasta a la prostitución.

Es cierto que un joven sabe hoy menos cuando ingresa a la Universidad, pero ¿de quien es la culpa? ¿De él? O de quienes ocultaron el conocimiento porque ese conocimiento cuestionaba el modelo de país. ¿Cómo se iba a enseñar que aspiramos a ser un país independiente de toda dominación extranjera si persisten sectores ultrareaccionarios como Javier Milei que dice admirar a Thatcher y Churchill? ¿Como no se iba a desmalvinizar e incluso olvidar las invasiones inglesas de 1806-1807 si la propuesta futura Ministra de Relaciones exteriores de Milei, le da la razón a los ingleses, reconociendo a los Kelpers como población autóctona? ¿O acaso no se les dijo a los jóvenes que la política era peligrosa no con palabras sino con una represión que tiene pocos parangones en la historia? ¿O no se les dijo que la ciencia no servía para nada cuando se desactivaron proyectos de alta tecnología como el Misil Cóndor? Hay culpables por acción u omisión de lo que no saben los jóvenes.

¿Y por qué todo esto? Porque no sólo la Reforma quedó inconclusa. También la Independencia de mayo de 1810 y julio de 1816 quedó inconclusa.

Escuchar las voces de la Reforma significa entonces discutir un proyecto de país independiente y un real gobierno de Democracia Popular. Porque hubo dos líneas en el movimiento reformista: la de los que creyeron que bastaba sólo con la reforma universitaria y la de los que creemos que esta es parte de la reforma industrial, la reforma agraria, la reforma educacional, la reforma sanitaria, la reforma laboral, etc. En suma, de una revolución democrática popular, agraria y antiimperialista que asegure nuestra independencia y los derechos del pueblo.

En suma, la nueva reforma exige participar en los tres movimientos de lucha o en las tres prácticas de la teoría científica del conocimiento humano:

          la práctica de la lucha por la independencia nacional y la soberanía popular,

          la práctica de la lucha por la producción (al servicio de quién y para quién).

          la práctica de la lucha por la investigación científica (también al servicio de quién y para quién).

Así surge la política educacional y científica: Ciencia y arte de hacer posible lo necesario en educación, ciencias y tecnología. Debemos discutir esto para saber qué educación, ciencia y tecnología necesita una Argentina independiente de Democracia grande.

En suma, esto implica ir a una reforma de fondo de la educación argentina. Hacer de la universidad una caldera en ebullición de ideas.

Hay que volver a la audacia intelectual de Harvey o al menos de Galileo. Pugnar por ser científicos, no ajustar las ideas a la moda mediática impuesta. La ciencia avanzó contra la moda, cuestionando las falsas apariencias.

¡Qué todo se discuta públicamente en el demos universitario!

Que florezcan cien flores y cien escuelas de pensamiento, para elegir la mejor.